viernes, 26 de septiembre de 2008

Juegos retorcidos



Jugar, no jugar, jugar en serio, vivir jugando, o jugar a vivir.
Mas de una vez tuve la sensación, al entablar alguna relación, (o al pretender entablarla, que no es lo mismo) de estar jugando un juego. Un juego que, se supone por lo general, maravilloso, pero que por otro lado, puede resultar agotador. E incluso en mas de una oportunidad da para replantearse muchas cosas acerca de la manera que estamos empleando para encarar ese vinculo.
Porque, al mejor estilo chinchón, esperamos ver la carta que tira el otro, como una manera de especular acerca de sus sentimientos o intenciones. Entonces caemos en la estúpida especulación de que si haces, que haces, porque lo haces, o porque no lo haces. Y siempre la respuesta es mas que subjetiva, sin mas responsable que nosotros mismos. Y pretendemos armar la estrategia de respuesta a partir de la jugada que ya vimos. Ahora, el problema esta cuando los dos nos quedamos esperando la jugada del otro, cuando ninguno de los dos se anima a dar el primer paso. Ese paso a veces tan decisivo, que lo invite al otro y le de la certeza de que se esta jugando al mismo juego.
Y entonces me pregunto por qué? Y la respuesta harto repetida, vuelve a llegar. El miedo, ese enemigo que nos paraliza, que no nos deja caminar, avanzar, que nos traba y nos condiciona. Ese miedo a fracasar, una y otra vez, a caer, a sufrir, a que sea en vano. Si sabemos lo que queremos, uno se pregunta, porque simplemente no va y lo busca, y sin embargo, no, no podemos. Doy un paso y vuelvo medio. En una apuesta permanente que busca ser re afirmada, pero que requiere de certezas en la otra parte. Y que no siempre se encuentran. O no se saben encontrar.
Hoy podria decir que tengo alguna clase de certeza, y es que no quiero perderme la oportunidad de jugar por quedarme esperando la jugada de enfrente. No quiero esperar ver tus cartas para elegir cual de las mias tiro. Quiero tener el coraje de tirar primero y que tu jugada sea la que esperaba. Y aunque mas de una vez el miedo me paralice, confio en que algun dia lo voy a lograr... ¿Jugamos de nuevo?

2 comentarios:

MALiZiA dijo...

siempre es bueno jugarse por lo que se quiere, lo que vale la pena, aunque se pierda, se sabe que se hizo de la mejor manera.
te dejo un saludo.

D dijo...

ke buen post... respira hondo y arriesgate, y despues me platicas como te fue pk yo nunka he logrado hacer algo asi...